Tegucigalpa, Honduras. De los 75 casos de personas ligadas a los medios de comunicación, que perdieron la vida violentamente entre 2001 y 2017, hay 69 en la impunidad por falta de investigación, denunció el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH).
El CONADEH hizo la revelación 24 horas antes de la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa. En su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en Honduras, presentado al Congreso Nacional, el ente estatal considera que la impunidad es una de las principales causas para que se siga asesinado a periodistas y comunicadores sociales.
El documento hace énfasis que 32 personas, entre periodistas, locutores, fotógrafos, camarógrafos y propietarios de medios, que representan el 43% del total de muertes violentas, perdieron la vida entre el 2014 y el 2017 (4 años).
Del seguimiento brindado por cada una de las delegaciones del CONADEH y de la cobertura periodística, en los distintos medios de comunicación, se constató que de las 75 personas ligadas a los medios de comunicación, que perdieron la vida en circunstancias
violentas, desde el año 2001, en el 92% de los casos, los responsables se cobijan con el manto de la impunidad. Hasta ahora, han sido objeto de sentencias los casos de Georgino Orellana, Aníbal Barrow, Héctor Francisco Medina Polanco (absuelto), Alfredo Villatoro, Artemio Deras y Carlos Hilario Mejía Orellana.
En septiembre de 2012 se registró la primer sentencia y fue el caso del periodista Georgino Orellana, dos años después, en el 2014, fueron sentenciados los responsables de la muerte de los periodistas Francisco Medina Polanco y Alfredo Villatoro, fue hasta el 2016 que se dictaron dos sentencias a los responsables de la muerte de Artemio Deras y
Carlos Mejia, finalmente en agosto del 2017, fueron sentenciados los autores materiales
de la muerte de Aníbal Barrow.
Registros estadísticos del CONADEH también identifican las armas de fuego como el principal “instrumento de muerte”. De los 75 casos de personas ligadas a los medios de comunicación que perdieron la vida, al menos, 67 que representan el 89%, fueron ultimados con arma de fuego, tres con arma blanca, dos estrangulados y tres que se desconoce el tipo de arma que usaron para quitarles la vida.
El informe establece, además, que 14 de los 18 departamentos del país han sido escenario de muertes violentas de personas ligadas a los medios de comunicación. De esta radiografía de la inseguridad para periodistas, comunicadores sociales y demás personas ligadas a medios de comunicación, en Honduras, los departamentos de Francisco Morazán (18), Cortes (17) y Yoro (8) reportan el 57% de las muertes.
El 43% restante en los departamentos: Copán con 6; Olancho, 5; Atlántida, 5; El Paraíso,
4; Colón, 3; Lempira, 3; Comayagua con 2; Santa Bárbara, 1; Choluteca con 1, Intibuca
1 e Islas de la Bahía con 1. Roberto Herrera Cáceres, titular del CONADEH, expresó que la muerte de personas ligadas a los medios de comunicación, se constituye en la forma de censura más extrema, ya que se priva a la víctima del bien más importante, que es la vida.
Indicó que la persistencia de la impunidad, genera un sentimiento de impotencia y
frustración en el pueblo hondureño y deja de manifiesto que Honduras sigue siendo un
país sin justicia para las víctimas ni castigo para los victimarios. Declaró que el sistema de justicia hondureño está en la obligación de prevenir, investigar y castigar, con todo el peso de la ley, al o los responsables de cometer actos de intimidación, amenazas a muerte, atentados e incluso hasta privar de la vida a personas ligadas a los medios de comunicación.
En suma, la labor que realizan periodistas, comunicadores sociales, camarógrafos y fotógrafos, continúa siendo una labor de alto riesgo para quienes la ejercen.
La Red de Comunicadores de la Federación Iberoamericana del Ombudsman (Red ComFIO), también se pronunció al respecto y considera que la muerte de periodistas no solo afecta al país donde registra el hecho si no que a toda la región de América y del mundo. “El luto que hoy vivimos por la muerte de periodistas no solo afecta al gremio si no que a toda la población en general”.
Añade que en varios países donde los periodistas se han atrevido a denunciar casos de corrupción, o delitos como el narcotráfico, han recibido como respuesta la intimidación, la amenaza contra su vida, la violencia o la muerte misma y, en ese sentido, “la impunidad no puede convertirse en una pared que debilita la libertad y el acceso a la información pública”.
En su pronunciamiento, la Red ComFIO, como órgano técnico en materia de comunicación de la Federación Iberoamericana del Ombudsman, califica de inaceptable
cualquier tipo de agresión contra el personal de la prensa y defensores de derechos
humanos.
“El derecho a informar no puede ser víctima del miedo, de la censura, del asesinato”,
señala la Red de Comunicadores.
Agrega, en el documento que “el derecho a informar debe estar protegido ahora más que
nunca, para impedir acallar su voz”.
“Es urgente que los Estados implementen o fortalezcan mecanismos de prevención para
evitar acciones que vayan dirigidas a inhibir el ejercicio profesional del periodismo”.
La Red ComFIO hace un llamado para que estos crímenes contra personal de la prensa
se investiguen de manera ágil, independiente e imparcial y con ello, los responsables comparezcan ante la justicia. “Basta ya de violencia y crímenes contra la prensa”, establecen finalmente en su pronunciamiento la Red de Comunicadores.
El Día Mundial de la Libertad de Prensa se celebra el 3 de mayo de cada año, para celebrar los principios fundamentales de la libertad de prensa, evaluar la situación de la
libertad de prensa en el mundo, defender a los medios de comunicación de los atentados
contra su independencia y rendir homenaje a los periodistas que han perdido la vida en el cumplimiento de su deber.