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Tegucigalpa, Honduras (Reporteros de Investigación)
El grupo criminal menos afectado por el gobierno ha sido la Mara Salvatrucha (MS) si se compara con la persecución contra la pandilla 18, cuyos integrantes no solo han sido detenidos o asesinados en operaciones policiales sino mencionados por políticos del gobierno en su discurso público.
En esa noticia de 2017: Julián Pacheco: «Se capturó a 825 pandilleros y este año vamos por más», el ministro de Seguridad habla de la detención de 498 pandilleros de la 18 y 21 son cabecillas, en contraste con 327 MS y 23 cabecillas.
Un análisis de las estadísticas de la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP) de diciembre 2018 al 26 de abril de 2019 da cuenta de 201 integrantes de la MS, detenidos, generalmente son miembros de escala inferior en el grupo. En cambio, entre los integrantes de la 18 hubo cabecillas detenidos y muertos y hubo clicas completas desarticuladas, según la FNAMP.
Descargar base de datos en Excell, elaborada por RI para comparar estadísticas de detenciones de MS y 18
En suma fueron 249 pandilleros de la 18 para el mismo periodo y hubo 11 integrantes de otras bandas.
Los integrantes de la 18 detenidos en la mayoría de casos fueron cabecillas. Un modo de operar muy parecido al de exterminar grupos rivales del narcotráfico para fortalecer el cartel de Sinaloa, tal como lo revela el libro Los Señores del Narco, una investigación de la periodista mexicana, Anabel Hernandez.
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Desde que se anunció la creación de la Fuerza Nacional Antimaras y Pandillas (FNAMP), la maquinaria estatal se ha enfocado en reducir
a la pandilla 18. Las clicas de la 18 han sido desarticuladas en Ciudad España y en la colonia Villeda Morales en la capital de Honduras. El mismo mandatario, Juan Orlando Hernández, ha participado en forma directa en la desarticulación de la 18.
En un comunicado emitido el 28 de enero de 2019, el estatal Canal 8 informó:
«la Operación Morazán II sigue dando fuertes golpes a las estructuras criminales en barrios, colonias, ciudades y caseríos de todo país con resultados positivos y contundentes. En ese contexto, la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP), anunció en un comunicado la liberación de la colonia Villeda Morales de Comayagüela. En la semana anterior el presidente Juan Orlando Hernández supervisó la mencionada colonia que ha sido afectada en los últimos años por la presencia y accionar delictiva, en su mayoría por la organización criminal pandilla 18, quienes operaban desde 2014.
“La parte de la presencia de maras a nivel de la violencia que teníamos antes prácticamente ha disminuido de manera importante, pero hay que consolidar eso”, expresó Hernández».
En la declaración de su hermano, Juan Antonio Hernández Alvarado, en el juicio que se le sigue por narcotráfico por la Fiscalía de Nueva York , supuestamente por estar ligado al cartel de Sinaloa, junto a diputados hondureños, alias Tony Hernández, también señala a la pandilla 18, mientras tanto, publicaciones de prensa internacional revelan que TH trabajó con la MS.
“Esa noticia fue hace como unos tres años creo. O dos años y medio. Primero salió otra que yo quería matar al embajador. Antes de eso, el embajador me había ayudado a salir de Gracias, perdón, de Honduras porque había obtenido él que me iba a matar la Mara Dieciocho, creo, no se. Él me ayudó y salimos el mismo día. Entonces yo no entiendo cómo yo quería matar al embajador y quería matar a mi hermano también en ese momento”.
Tony Hernández, alias TH, hermano del gobernante de Honduras.
No es la primera vez que se habla de la supuesta penetración de la MS en estructuras estatales.
La Operación Revancha realizada en marzo de 2016, en la misma semana que era asesinada Berta Cáceres, demostró la implicación de altos oficiales de la Policía Nacional ligados a la MS para sicariato y lavado de activos y es la única de este nivel porque el resto de golpes han sido más fuertes para sus rivales.
Del mismo modo, durante la Semana Santa de 2019, el 17 de abril de 2019, la periodista Sonia Nazario reveló en el periódico The New York Times un artículo que deja entrever que la detective de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) Sherill Yubissa Hernández Mancía sufrió un crimen y no un suicidio. «Hernández tenía 28 años y era funcionaria de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), el órgano que se encarga de investigar los asesinatos de mujeres. Ella tenía una relación amorosa con Wilfredo García, quien era director de la oficina de la ATIC en San Pedro Sula, la segunda ciudad más grande de Honduras. Según personas involucradas en el caso, Hernández llegó a sospechar que su amante, quien además está casado con la hermana de un líder de la MS-13 —la pandilla más grande del país—, ayudaba a los criminales en vez de trabajar para acabar con el grupo delictivo», cita el periódico.
Más muerte de la 18 en cárceles
En esta ola de sucesos más favorables para un grupo criminal que para otro, hasta 2015, la mayoría de jóvenes asesinados dentro de centros de internamiento eran de la pandilla 18. En enero de 2015, las autoridades encontraron una fosa clandestina con cadáveres, en las instalaciones de Renaciendo. La versión oficial es que los jóvenes habrían fallecido en una supuesta confrontación entre la 18 y Los Chirizos.
En febrero de 2015, supuestos miembros de la MS le cortaron dedos a niños de El Carmen por considerar que eran de la 18.
El 23 de agosto de 2015, tres pandilleros de la Mara 18 fueron asesinados, dentro de Renaciendo. Con las autopsias, los forenses dictaminaron que los tres adolescentes murieron como producto de los golpes y ya estando muertos, los descuartizaron, consta en los dictámenes número AT-1593-15 alAT-1595-15 en poder de RI.
En 2007, fallecieron cuatro pandilleros de la 18 en Renaciendo; en mayo de 2014 hubo cinco muertes de integrantes de la 18 en el Centro El Carmen.
