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La oligarquía y sus perros de presa y de caza

Columna de opinión

Por Jaime Flores

Tegucigalpa, Honduras | Reporteros de Investigación. Dos generales de las “valientes, aguerridas, gloriosas e impolutas” fuerzas armadas hondureñas aparecieron, como conejos sacados de un sombrero, en un foro televisivo, para denunciar ante propios y extraños que “el gobierno de la presidenta Iris Xiomara Castro atenta y pone en peligro la sacrosanta y estable democracia hondureña”. 

No debe causar extrañeza que estos generales aparezcan de la nada en ese foro televisivo, dirigido por un periodista que rebasa las fronteras de la ignorancia y en Televicentro; corporación mediática vocera del ultra conservadurismo y empeñada en deslegitimar al actual gobierno.

Tanto el ignaro periodista, caracterizado por servil y cobarde, como la corporación de noticias, quien es la que ordena, “con buen tino y con un perfil estudiado”, invitan a dos grotescos chafarotes, quienes históricamente han sido los perros de presa y de caza de la diabólica oligarquía nacional y del imperialismo norteamericano.

El rastrero de Renato Álvarez y Televicentro cometió un craso error y fue enfrentar a los generales de hojalata con dos políticos fogueados; con superiores capacidades intelectuales y con mayores conocimientos en los temas a abordar; democracia y socialismo, sistema político que asusta a los cavernarios castrenses, ¡Vaya ignorancia!

Uno, de los dos generales en el foro, se presenta como un adalid y defensor de la democracia, ¡oh sorpresa! fue quien dirigió el golpe de Estado del 28 de junio del 2009. Pero que puede esperarse de un robacarros, como lo fue en el pasado Romeo Vásquez Velásquez, quién no ha respondido por los crímenes cometidos cuando dio el zarpazo al estado de derecho.

El otro general, de esos valientes que forma el Ejército Hondureño, fue empleado de la narco dictadura y del narco dictador y durante estos ocho años mantuvo sus fauces cerradas y ahora, bayoneta en mano, sale defendiendo la sacrosanta democracia.
¡Vaya cinismo, vaya desfachatez de estos generales de hojalata! aunque su comportamiento no es de extrañar; el comando sur estadounidense los educa para matar, asesinar, mentir y robar, pero ahora, que hay un gobierno de “izquierda” son baluartes de la democracia.

Después de la trapeada que recibieron estos dos “valientes” generales por la designada presidencial Doris Gutiérrez y Carlos Eduardo Reina, las preguntas a las que hay que responder son: ¿Qué pretende la oligarquía? ¿Qué pretenden los militares? ¿Qué pretenden los criminales del Partido Nacional? ¿Qué pretende el crimen organizado?

En principio salen a “ladrar”, para meter miedo a la población sobre lo peligroso que es el “socialismo del Siglo XXI” y hacer correr esa bola de nieve hasta generar las condiciones para otro golpe de estado o para, con sus escuadrones de la muerte, asesinar a los que piensan diferente.

Y es que a la rancia oligarquía, motivos le sobran para sacar a sus perros de garra de la madriguera, debido a que no pasa un buen momento con este gobierno refundacional, principalmente la bancaria, que se hartó de plata con la narco dictadura y ahora todos esos privilegios, aunque sea a cuentagotas, van despareciendo, como son los tales fideicomisos.

Los criminales del Partido Nacional son otros que se encuentran muy nerviosos, deben mucho, no sólo actos de corrupción, sino que también crímenes y harán cualquier cosa por continuar en el poder; lo único que les garantiza impunidad o para no ir presos o ser extraditados a USA.

La presencia de estos dos generales en ese foro y en esa corporación mediática, acusando a la presidente electa de antidemocrática, solo demuestra el descontento existente de la oligarquía, que se siente mejor con una narco dictadura, que con un gobierno elegido democráticamente y que orienta las políticas públicas a favorecer a las grandes mayorías.

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