Tegucigalpa, Honduras | Reporteros de Investigación. La implementación de estado de excepción parcial en algunos municipios, una investigación de inteligencia criminal financiera, reformas legislativas, intervención comunitaria en el sistema educativo nacional, control desde la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) y la identificación de las estructuras intelectuales de cuello blanco que lideran la extorsión en Honduras, son pilares fundamentales del Plan Integral Antiextorsión.
Mientras la prensa masiva enfoca su atención en maras y pandillas y quita de foco a militares, políticos y empresarios que han exacerbado la extorsión en el país, fue la mandataria hondureña y comandante de la Policía Nacional de Honduras, Xiomara Castro, quien lideró esta mañana la conferencia de prensa.
En los últimos 12 años, Honduras fue víctima de un cartel del narcotráfico que desde la presidencia elevó los niveles de violencia y estos grupos ampliaron sus alcances, expuso Castro.
De tal forma que la Estrategia Integral Antiextorsión va más allá de afrontar el tema solo desde una óptica policial.
Las reformas necesarias para combatir la extorsión se harán solicitando la dispensa de debates, dijo el presidente de la Comisión Legislativa de Seguridad, Rafael Sarmientos.
“Tendremos que socializarlo con todas las bancadas, de emergencia”, según el legislador.
Rostros ocultos de cuello blanco
Para el jefe de Servicios Especiales, comisionado Miguel Pérez Suazo, es difícil llegar a los delincuentes de cuello blanco de la extorsión porque nunca dan la cara. Siempre tienen peones para cobrar. En las estructura hay un autor intelectual, cabecillas, operarios, persona vinculadas a los gobiernos, de acuerdo con la descripción perfilada por la inteligencia policial.
Los grupos de cuello blanco que manejan la extorsión están identificados y se recopila la evidencia. Hay más de mil millones de lempiras para enfrentar el delito ahora con la incorporación de tecnología y en esto debe participar la Comisión Nacional de Banca y Seguros (CNBS), sugirió el ministro de Seguridad, Ramón Sabillón, en rueda de prensa, desde Casa Presidencial.
La explicación del ministro es que la extorsión ya no es un delito que opera de manera aislada sino que es parte de una especie de capital criminal de un modelo negocios que financia tráfico de armas, narcotráfico, sicariato.
Una pregunta para explicar este fenómeno es que si ¿había un presidente narcotraficante, según la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, ahora extraditado, habrá una consecuente participación de políticos en la extorsión?
—Se abre la esfera y es lo que usted está planteando y es cierto y es una probabilidad, respondió Sabillón.
Lejos de enfocar los esfuerzos en la detención de autores materiales que son utilizados para pagar renta, la guerra que se ha declarado es contra los cerebros de la extorsión.
Vea nuestra investigación: Cerebros de la Extorsion
Rodeado de cámaras y micrófonos a pocos metros de las gradas principales de Casa Presidencial, el director de la Policía Nacional, comisionado Gustavo Sánchez Velásquez, reveló que el poder de la estructura que maneja la extorsión en el país es tal que tienen un esquema de “lobistas”.
Hay lobby político para promover la inseguridad
“El crimen organizado está utilizando a ciertas personas reconocidas que generen el lobby necesario para que se perciba en el país una crisis más aguda de la que en realidad tenemos”. El lobby según el director policial está encaminado a mantener en vigencia el tema de la inseguridad, entre la opinión pública.
“Estamos totalmente convencidos que cuando nosotros mandemos las reformas (al Congreso Nacional) se van a contratar a profesionales para que los grupos criminales llámese narcotraficantes pandilla, 18, 13”, intentarán impedir que estas reformas pasen, dijo el doctor Sánchez Velásquez.
Un ejemplo del montaje en materia de seguridad es que la prensa publicó que el alcalde de Ojojona había declarado estar en emergencia por la extorsión. Cuando las autoridades de la Dirección Policial Antimaras y Pandillas contra el Crimen Organizado (Dipampco) llegaron al sector descubrieron que la realidad no correspondía con la representación mediática del tema.